La danza es un arte, una forma de comunicarse y para la gente que lo practica o se dedica a ello, un cumulo de sensaciones que solo es posible explicar cuando de verdad te gusta y disfrutas de hacerlo.
La danza, en este caso la danza clásica, para los niños es muy beneficioso y ayuda en su coordinación, en su mente y en su físico, algo positivo que deberían tener todos los niños como obligación. A estos les produce una sensación de libertad, un ratito en su día a día en el que pueden divertirse.
En esta actividad lo que se pretende no es más que eso, que los niños se diviertan, puedan disfrutar de lo que hacen sin saber que están trabajando la mente y su físico. A la edad de los 3 años hasta los 9-10 aproximadamente es la mejor edad para que un niño empiece a practicar este tipo de danza ya que en ella se exige una flexibilidad y unas condiciones que resultan más fáciles de desarrollar si empiezas desde pequeño.
En esta actividad se quiere sacar resultados como: que los niños sean conscientes de su cuerpo, que deben cuidarlo, que antes de estirarse deben calentar bien para no provocar lesiones y que sobre todo la danza esta para disfrutarla y pasárselo bien.
En esta actividad realizamos ejercicios como, el previo calentamiento, los estiramientos necesarios para ese día, aprenden pasos de la danza clásica tanto como se llaman y como ejecutarlos, y para acabar siempre con bailes divertidos ya que están aquí para disfrutar y pasarlo bien y deben acabar liberándose, darles la libertad que no tienen en otras horas de su vida como estudiante.
Todo el mundo debería bailar, es una sensación que pocos conocen y que debería ser más común en todo el mundo, que la gente apostara y practicara más la danza sea en el estilo que sea.